Mirame! Mirame! Mirame!
Quiero hurgar en tu vida yo también!
Le dedique 100 días mas o menos a una investigación personal.
Fue hecha de manera científica.
Me propuse participar de manera anónima o real de distintas redes de la red adoptando diversas pesonalidades.
Nerd, filósofa, kirchenerista, psicópata, amante despechado, racista, fanático religioso, que se yo...
Un montón de caretas.
Me fue fácil.
Los personajes tienen que mantenerse un poco para hacerlos creíbles.
Todos tienen adeptos y detractores.
Las reacciones de los otros anónimos son geniales.
Las vistas a tu perfil suben estrepitosamente si pones algo que nadie se anima a poner pero todos piensan.
Te bloquean.
Te insultan.
Están totalmente de acuerdo con vos.
Buscan tu nombre en google y entran a todos tus sitios tratando de saber "algo más" de uno.
Quieren hacerse ver y mirarte.
Quieren contarte cosas y lo que piensan.
Quieren saber de vos pero sin preguntártelo entonces reviscachean.
Comentar en sitios de gente famosa garpa.
Las estadísticas saltan.
Las reacciones son como si fuese verdad lo que se pone.
Se quiere creer que un arquetipo personificado existe.
Se quiere salir en la primera plana.
La autocensura es terrible, si encontrás un comentario o sitio copado entonces es anonymus.
Lo identificable a la legua se nota que esta pensado como un disfraz para hacerlo aceptable ante la gente que se conoce en la vida real.
Cuando salió la internet me pareció algo super democrático pero hay mucho boludo dando vuelta.
Aquí estoy yo. Armando bardo en vano que es una diversión barata.
Capisce?
Al final voy a compartir las conclusiones con la humanidad porque sino va a ser un desperdicio.
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